Want to contribute to conservation of your local orchids? Explore community science – also known as participatory science – which invites the public to join in gathering scientific data.
“Here in Virginia so much of the landscape is privately owned. Doing research on private land is opening up a whole new picture of how our land management is influencing biodiversity,” says conservation biologist Amy Johnson of Virginia Working Landscapes, a community science program of the Smithsonian National Zoo and Smithsonian Conservation Biology Institute.
In one recent project, local landowners allowed volunteer community scientists to perform field surveys of orchids on their properties. At each site, volunteers searched for native orchids and recorded pertinent data about them. Scientists then evaluated the diversity, distribution, and abundance of these orchids and compared data with existing forest conditions and land management practices. Understanding how these factors impact forest health will empower more effective conservation work in the future.
Through community engagement, scientists use crowdsourcing to expand statistical data that contributes to the development of sustainable solutions.
¿Quiere contribuir a la conservación de las orquídeas locales? Explore la ciencia comunitaria, también conocida como ciencia participativa, que invita a la población a participar en la recopilación de datos científicos.
“Aquí en Virginia, gran parte de los terrenos son propiedad privada. Hacer investigaciones en tierras privadas está abriendo paso a un panorama completamente nuevo de cómo nuestro manejo de la tierra influye en la biodiversidad”, dice la bióloga conservacionista Amy Johnson de Virginia Working Landscapes, un programa de ciencia comunitaria del Zoológico Nacional del Smithsonian y el Instituto Smithsonian de Biología de la Conservación.
En un proyecto reciente, los terratenientes locales permitieron a científicos voluntarios de la comunidad realizar estudios de campo de las orquídeas en sus propiedades. En cada sitio, los voluntarios buscaron orquídeas nativas y registraron datos pertinentes sobre ellas. Luego, los científicos evaluaron la diversidad, distribución y abundancia de estas orquídeas y compararon los datos con las condiciones forestales existentes y las prácticas de manejo de tierras. Comprender cómo inciden estos factores en la salud de los bosques permitirá que el trabajo de conservación sea más eficaz en el futuro.
Gracias a la participación de la comunidad, los científicos utilizan la colaboración abierta para expandir los datos estadísticos que contribuyen al desarrollo de soluciones sostenibles.